miércoles, 9 de diciembre de 2020

SÉPTIMO FASCÍCULO (SEGUNDA PARTE): CRÍTICA A LA TEORÍA DE LA RELATIVIDAD GENERAL. LA FALACIA DEL PRINCIPIO DE EQUIVALENCIA. DOS ERRORES COMETIDOS AL ACEPTAR EL PRINCIPIO DE EQUIVALENCIA.

En la primera parte de este fascículo, hemos expuesto el experimento mental que proponía A. Einstein para querernos “colar” la validez de su teoría general, a través del llamado “Principio de Equivalencia”. Ahora veremos más errores de concepto que conducen a considerar estas ideas como una falacia.

El “Principio de Equivalencia” comete el error de admitir la EQUIVALENCIA entre los resultados obtenidos al aplicar una fuerza inercial de TRACCIÓN con una fuerza de ATRACCIÓN, como es la fuerza gravitatoria.

En la Figura 1 quedan representadas las acciones de estos dos tipos de fuerza. 


En la parte izquierda del dibujo se representa la acción de una Fuerza de Contacto. En este tipo de fuerza, el objeto que la provoca está en contacto con el objeto de que la padece. Este tipo de fuerza puede ser de Tracción o de Empuje. En la parte derecha del dibujo se representa otro tipo de fuerzas. Son las Fuerzas de Atracción. En ellas incluimos la fuerza gravitatoria y la fuerza magnética.

En el razonamiento utilizado al plantear el referido experimento mental, además de confundir la actuación de dos tipos diferentes de fuerzas, existe un segundo error. El error consiste en confundir el CONTENEDOR con su posible CONTENIDO. Para hacernos entender, confunde el “ascensor” o la carcasa de este, con los objetos o masas que están dentro de él.

 

UNA CONFUSION DE IDEAS:

Se trata de una semejanza entre experimentos, no se trata de una equivalencia de efectos que han sido provocados por diferentes causas.

El experimento mental empieza considerando que una fuerza de ATRACCIÓN, como es la fuerza de la gravedad (G), actúa tanto sobre el CONTENEDOR como sobre el CONTENIDO (las Masas). Así pueden ocurrir los fenómenos físicos relacionados con la MASA. 


La Figura representa las leyes del péndulo y la del tiro parabólico sometida la MASA a una fuerza de ATRACCION: la Gravedad (G). 

Pero… en otra parte cambia de tipo de fuerza y pretende equiparar sus mismos efectos.

La fuerza de TRACCIÓN no puede equipararse a una fuerza de ATRACCIÓN SOBRE el CONTENEDOR. La fuerza de TRACCIÓN actúa solo sobre el CONTENEDOR (sobre la carcasa del ascensor) NO sobre el CONTENIDO, que son las MASAS interiores al mismo.

Además, se contradice con una de las condiciones que expusimos en nuestra anterior entrega. La dirección de la Fuerza de Tracción no es perpendicular al sentido de la marcha. Su dirección es la misma que la de la marcha. Se transmite en toda la carcasa y, por este motivo en el suelo de este.

La figura 3 pretende exponer esta circunstancia.


Pretende equiparar la «sensación» que parece que ocurre cuando se suelta una masa dentro del ascensor, con la realidad de la caída de una masa por acción de una fuerza de atracción (la gravedad). 

No podemos valorar el resultado de un experimento físico, juzgándolo por “sensaciones o sentimientos” como afirma A. Einstein en su experimento mental.

La figura 4 pretende expresar esta falsa equiparación. 

Para desenmascarar esta falsa equiparación decimos: NO ES LA MASA QUE «CAE», ES EL SUELO QUE “SUBE”.

No se genera ninguna Fuerza de ATRACCIÓN, como es la que ejerce la Gravedad y que hace “caer” las masas.


La Figura representa tres instantáneas del ascensor en su “subida” tirado por la cuerda que tiene sujetada en el techo. El hombre es como si formase parte de la carcasa, ya que está en contacto con ella, y está sujeto a una presión en sus pies. Es la misma fuerza de TRACCIÓN ejercida por la cuerda y transmitida por la carcasa hasta su base.

No ocurre lo mismo con la Masa (contenido) que está dentro del ascensor y que no forma parte de su carcasa. Esta Masa llega a tocar el suelo del ascensor por desplazamiento de la carcasa.

 

UNA FALACIA DE ATINENCIA LÓGICA.

En el libro que tomamos como referencia pretende apoyar la validez de su experimento mental con la siguiente sentencia:

“…Tómese buena nota de que la posibilidad de esta interpretación descansa en la propiedad fundamental que posee el campo gravitatorio de comunicar a todos los cuerpos la misma aceleración, o lo que viene a ser lo mismo, en el postulado de la igualdad entre masa inercial y masa gravitatoria...”

Con este enredo de conceptos pretende justificar lo injustificable.

COMENTARIO: Si consideramos constante la fuerza de TRACCIÓN, es lógico suponer que todas las MASAS “tocarán el suelo” al mismo tiempo. La conclusión a que llega es una patraña para buscar una EQUIVALENCIA que no existe. El efecto de que “toquen al suelo” todas las Masas al mismo tiempo proviene de dos causas diferentes que, a su vez, provienen de dos efectos diferentes. Toma una referencia para justificar casos diferentes.

(NOTA: Ver las falacias de atinencia lógica, en el libro de Irving M. Copy “Introducción a la Lógica”. Simplificando podemos decir que: “como que ocurre este efecto debemos aceptar que las causas son idénticas”. Si construimos un silogismo de lógica veremos que no podemos establecer una atinencia lógica entre sus premisas y su conclusión). 

Hemos diseñado la siguiente figura que la podemos llamar como: EL MUNDO DE LOS SUEÑOS - LOS EXPERIMENTOS MENTALES


Nosotros, desde fuera, observamos el “Patio de los deseos”.

Desde fuera del patio, interpretamos que el observador de dentro del patio piensa que la persona que está dentro del ascensor interpretará su presión en los pies EQUIVALENTE a una fuerza de Atracción tal como es la GRAVEDAD.

Nuestro ojo ve lo que está contemplando el observador externo en su experimento mental, y lo que parece que ve o experimenta la persona que hemos colocado dentro del ascensor.

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